SI TU PALANCA DE CAMBIOS HACE ESTE RUIDO
¿Os habéis preguntado jamás porque es necesario cambiar de marcha cuando se conduce un automóvil?
Y ¿de dónde sale ese ruido molesto cuando erramos al poner la marcha?
En este video os contaremos lo que ocurre cuando cambiamos de marcha en nuestro vehículo, mediante las explicaciones del funcionamiento del embrague y del cambio manual.
En nuestro video anterior descubrimos lo que ocurría al girar la llave en el contacto para arrancar el motor. Ahora nos dispondremos a ver lo que tenemos que hacer para poner en marcha nuestro automóvil.
Supongamos que el cambio de nuestro coche este en punto muerto, es decir que no hayamos puesto ninguna marcha. Para empezar lo que tenemos que hacer es pisar a fondo el pedal de embrague que se halla a nuestra izquierda. Mediante un sistema mecánico, precisamente este pedal es el que deja libre el embrague, es decir un disco de alto coeficiente de fricción que permite con el cambio unir o separar de forma gradual el movimiento del volante y del cigüeñal, asimismo desconectando la rotación entre motor y cambio.
Acto seguido, pisando el embrague, tenemos que poner el cambio de marchas en primera. Al hacer esto, los engranajes de la primera entran en función. Ahora que ya tenemos encajados los engranajes, se podrá ir soltando gradualmente el pie del pedal de embrague de modo a conectar el motor con la caja de cambios y así poner en marcha el coche. En este cambio podemos observar que a su vez los engranajes de la segunda también están girando pese a no estar todavía conectados al cigüeñal. Así pues, estos no transmiten el movimiento a las piezas consiguientes.
El pedal de embrague tiene por consiguiente un papel fundamental en el cambio de marchas. De hecho, si utilizáramos el cambio sin antes separarlo del motor, nos arriesgaríamos a dañarlo y sin duda oiríamos chirriar los dientes de los sincronizadores en movimiento.
Bien, ahora concentrémonos en el principio básico del cambio. Dado que, en el motor de combustión, la relación entre el par motor y las vueltas es eficiente en una graduación limitada, el cambio es una pieza mecánica que tiene la función de alterar la característica del par motor. Éste permite seleccionar cada vez una relación de transmisión diferente en base a la velocidad del vehículo y de las vueltas del motor, como también en función de si nos encontramos en condiciones de tener que ponernos en marcha parados, o si ya estamos desplazándonos a una determinada velocidad.
Durante el uso de las primeras marchas se mantendrá una relación de transmisión con un par motor elevado para poder garantizar una buena aceleración, sin embargo, al mismo tiempo se mantendrá una velocidad baja, que resultará muy útil para poder ponerse en marcha estando parados o para recorrer una carretera con pendiente. Al aumentar la velocidad, el cambio de marcha se realizará manualmente con sus relaciones consiguientes hasta alcanzar la última marcha. Ésta última tendrá una velocidad de rotación elevada, pero a la vez un par motor mucho más bajo que se traducirá en una aceleración más escasa, resultando útil, por ejemplo, en un recorrido largo y recto para mantener una velocidad constante.
¿Os habéis preguntado jamás porque es necesario cambiar de marcha cuando se conduce un automóvil?
Y ¿de dónde sale ese ruido molesto cuando erramos al poner la marcha?
En este video os contaremos lo que ocurre cuando cambiamos de marcha en nuestro vehículo, mediante las explicaciones del funcionamiento del embrague y del cambio manual.
En nuestro video anterior descubrimos lo que ocurría al girar la llave en el contacto para arrancar el motor. Ahora nos dispondremos a ver lo que tenemos que hacer para poner en marcha nuestro automóvil.
Supongamos que el cambio de nuestro coche este en punto muerto, es decir que no hayamos puesto ninguna marcha. Para empezar lo que tenemos que hacer es pisar a fondo el pedal de embrague que se halla a nuestra izquierda. Mediante un sistema mecánico, precisamente este pedal es el que deja libre el embrague, es decir un disco de alto coeficiente de fricción que permite con el cambio unir o separar de forma gradual el movimiento del volante y del cigüeñal, asimismo desconectando la rotación entre motor y cambio.
Acto seguido, pisando el embrague, tenemos que poner el cambio de marchas en primera. Al hacer esto, los engranajes de la primera entran en función. Ahora que ya tenemos encajados los engranajes, se podrá ir soltando gradualmente el pie del pedal de embrague de modo a conectar el motor con la caja de cambios y así poner en marcha el coche. En este cambio podemos observar que a su vez los engranajes de la segunda también están girando pese a no estar todavía conectados al cigüeñal. Así pues, estos no transmiten el movimiento a las piezas consiguientes.
El pedal de embrague tiene por consiguiente un papel fundamental en el cambio de marchas. De hecho, si utilizáramos el cambio sin antes separarlo del motor, nos arriesgaríamos a dañarlo y sin duda oiríamos chirriar los dientes de los sincronizadores en movimiento.
Bien, ahora concentrémonos en el principio básico del cambio. Dado que, en el motor de combustión, la relación entre el par motor y las vueltas es eficiente en una graduación limitada, el cambio es una pieza mecánica que tiene la función de alterar la característica del par motor. Éste permite seleccionar cada vez una relación de transmisión diferente en base a la velocidad del vehículo y de las vueltas del motor, como también en función de si nos encontramos en condiciones de tener que ponernos en marcha parados, o si ya estamos desplazándonos a una determinada velocidad.
Durante el uso de las primeras marchas se mantendrá una relación de transmisión con un par motor elevado para poder garantizar una buena aceleración, sin embargo, al mismo tiempo se mantendrá una velocidad baja, que resultará muy útil para poder ponerse en marcha estando parados o para recorrer una carretera con pendiente. Al aumentar la velocidad, el cambio de marcha se realizará manualmente con sus relaciones consiguientes hasta alcanzar la última marcha. Ésta última tendrá una velocidad de rotación elevada, pero a la vez un par motor mucho más bajo que se traducirá en una aceleración más escasa, resultando útil, por ejemplo, en un recorrido largo y recto para mantener una velocidad constante.
Para poder cambiar la relación de marchas en conducción, cada par de engranajes está dotado de un sincronizador que permite a los ejes del cambio sincronizar ajustar con precisión su velocidad antes que ambos engranajes entren en contacto.
Si se cambiase de marcha durante esta fase sin haber previamente apretado el embrague, los dientes del sincronizador no acabarían de encajar con los del engranaje. Los ejes rotarían a una velocidad diferente, no permitirían que el sincronizador concordara el movimiento de los ejes; ya que el motor continuaría facilitando la rotación a uno de ellos solamente. Todo esto resulta en la clásica rascadura que experimentamos cada vez que no apretamos a fondo el pedal del embrague.
Ahora nos dispondremos a ver las otras relaciones de cambio que entran en función, la segunda, tercera, cuarta y la quinta. La marcha atrás por otro lado funciona de forma distinta.
JAES, comprometida desde hace más de diez años en el sector de los suministros industriales, se ha convertido en el socio de referencia para algunas de las empresas más importantes dentro del mundo de la industria automovilística. JAES ofrece todo su soporte técnico para todos los componentes necesarios durante el proceso de fabricación de muchos tipos de vehículos.
La marcha atrás se diferencia de las otras marchas porque posee un engranaje suplementario que se encuentra colocado entre otros dos engranajes. De modo que, el eje de salida dará vueltas en el sentido inverso. Es importante destacar que la marcha atrás carece de sincronizador, así pues, se hace necesario parar completamente los engranajes. Es decir, solo podemos meter la marcha atrás cuando y solo si el coche está parado.
En estos momentos, la rotación de salida, mediante el diferencial y los ejes de transmisión es trasladada a las ruedas que a su vez transmiten el movimiento al automóvil. En el próximo video os explicaremos su funcionamiento y cómo se comporta un automóvil al tener que enfrentarse a una curva.
Si este video te fue útil, rogamos nos lo haga saber dejando un like y un comentario. Además, agradeceríamos que lo compartiera. No se olviden de suscribirse al canal y les recomendamos de visitar nuestra página web www.jaescompany.com para estar al corriente de nuestros proyectos futuros.
Si se cambiase de marcha durante esta fase sin haber previamente apretado el embrague, los dientes del sincronizador no acabarían de encajar con los del engranaje. Los ejes rotarían a una velocidad diferente, no permitirían que el sincronizador concordara el movimiento de los ejes; ya que el motor continuaría facilitando la rotación a uno de ellos solamente. Todo esto resulta en la clásica rascadura que experimentamos cada vez que no apretamos a fondo el pedal del embrague.
Ahora nos dispondremos a ver las otras relaciones de cambio que entran en función, la segunda, tercera, cuarta y la quinta. La marcha atrás por otro lado funciona de forma distinta.
JAES, comprometida desde hace más de diez años en el sector de los suministros industriales, se ha convertido en el socio de referencia para algunas de las empresas más importantes dentro del mundo de la industria automovilística. JAES ofrece todo su soporte técnico para todos los componentes necesarios durante el proceso de fabricación de muchos tipos de vehículos.
La marcha atrás se diferencia de las otras marchas porque posee un engranaje suplementario que se encuentra colocado entre otros dos engranajes. De modo que, el eje de salida dará vueltas en el sentido inverso. Es importante destacar que la marcha atrás carece de sincronizador, así pues, se hace necesario parar completamente los engranajes. Es decir, solo podemos meter la marcha atrás cuando y solo si el coche está parado.
En estos momentos, la rotación de salida, mediante el diferencial y los ejes de transmisión es trasladada a las ruedas que a su vez transmiten el movimiento al automóvil. En el próximo video os explicaremos su funcionamiento y cómo se comporta un automóvil al tener que enfrentarse a una curva.
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